🔴 Eje (rojo)
– Situado en el centro vertical de la composición, sostiene el equilibrio axial del conjunto.
– Es la línea estructural más fuerte, que actúa como guía de simetría y soporte visual.
🔵 Líneas de fuga (azul)
– Convergen hacia un punto superior, fuera del encuadre, reforzando la sensación de ascenso.
– Enmarcan el espacio abovedado y canalizan la mirada hacia el punto más alto del arco central.
🟢 Simetrías (verde)
– Los arcos y ventanales laterales mantienen correspondencias rítmicas, equilibradas respecto al eje.
– Cada lado reproduce el gesto ascendente del otro, generando armonía estructural.
🟠 Direcciones visuales (naranja)
– Las diagonales cruzadas conducen la atención desde la base de los muros hacia el centro.
– Crean movimiento interno y profundidad dinámica, como un flujo de energía ascendente.
⚫ Contornos (negro)
– Delimitan la masa de piedra, marcando los nervios principales y las divisiones de los ventanales.
– Funcionan como el esqueleto arquitectónico del conjunto.
Síntesis final del esquema:
La composición se organiza alrededor de un eje firme, mientras las líneas de fuga y las diagonales activan el espacio hacia arriba. La geometría articula tensión y armonía, expresando la búsqueda de equilibrio entre peso y elevación, materia y luz.
Punto de vista cromático
Predomina una paleta cálida-fría: ocres y marrones pétreos contrastan con los vidrios azules, rojos y amarillos. El color funciona como filtro lumínico: los tonos fríos aportan profundidad, los cálidos sugieren energía y devoción. La luz se tiñe de rosa y violeta al mezclarse con la piedra, creando un ambiente místico y envolvente.
Punto de vista de género visual
Fotografía arquitectónica interior, centrada en la estructura y el juego lumínico de las vidrieras. Se aproxima al género espiritual y simbólico.
Punto de vista estilístico
Fusión de gótico y modernismo catalán: nervaduras expresivas, geometría orgánica y estructura vista. La textura pétrea y el color vibrante evocan una reinterpretación artesanal de la tradición medieval.
Punto de vista artístico
Tratamiento de la luz semejante al claroscuro místico: haces coloreados penetran el espacio con intención espiritual. La composición recuerda la búsqueda lumínica de Gaudí o del expresionismo arquitectónico.
Punto de vista emocional
Transmite asombro, recogimiento y elevación. La luz coloreada humaniza la piedra, generando una atmósfera de trascendencia íntima.
Punto de vista reflexivo
La obra sugiere la unión entre materia y espíritu: la piedra —pesada, terrenal— se disuelve en color y luz. Representa la aspiración humana hacia lo divino mediante la estructura.
Punto de vista narrativo
Podría narrar la historia del ascenso interior: desde la sombra pétrea de la base hasta la luminosidad superior. El tiempo narrativo es contemplativo y suspendido.
Punto de vista simbólico
Las vidrieras funcionan como metáfora del alma que deja pasar la luz divina. Las nervaduras, como caminos hacia la trascendencia.
Versión poética condensada
La piedra se curva, reza y respira.
El color atraviesa su piel,
la luz se fragmenta en promesas.
Columnas que son plegarias,
ventanas que abren el cielo.
El silencio vibra en tonos rosados.
Un orden secreto sostiene el aire,
mientras el ojo asciende y se disuelve.
Microglosario visual
- Verticalidad
- Trascendencia
- Ritmo
- Luz coloreada
- Elevación
- Silencio